
VUELVE CASA ATLÁNTICA A MADRID
El Atlántico no solo se contempla, también se vive. Y del 26 al 29 de junio,...
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De la audacia y energía de Ana Locking ha nacido la Edición Limitada más inconquistable de Mar de Frades, declara al comienzo de la presentación Remi Sanz, Brand Manager de la bodega gallega, que cada año recrea un binomio entre su albariño, D.O. Rías Baixas, y el mundo de la moda, con el que la marca tan bien se identifica y del que le gusta formar y sentirse parte.
Este tiempo juntos ha sido un enorme placer y un verdadero privilegio, apunta orgulloso Sanz en su discurso de presentación de la nueva estética de la botella azul.
Vanguardia industrial y atlántica
Hemos reunido a periodistas, seguidores y amantes de nuestro vino en un espacio disruptivo y vanguardista, caracterizado por una atmósfera industrial, que da lugar a una puesta en escena llena de contrastes. La Escuela Técnica Superior de Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos de la Universidad Politécnica de Madrid, ubicada en plena Ciudad Universitaria, ha sido el lugar donde Ana Locking ha reivindicado que desde el principio del proyecto supo que su trabajo se basaría en la reinterpretación de una de las señas de identidad de Mar de Frades: su ola.
Bajo esa perspectiva he creado un diseño que fusiona a la perfección nuestros valores e identidad, dando como resultado una ola más atrevida y vanguardista. He intentado conseguir esa mezcla de texturas tan característica de mi trabajo, ha explicado Ana Locking, quien se confiesa fan de una marca, que se atreve a arriesgar como seña de identidad.
Cuando el consumidor acaricie la botella el tacto será un aspecto diferenciador, como consecuencia de los dos stamping superpuestos en la etiqueta, cuyo azul, además, es más brillante y eléctrico. El tacto distintivo se unifica con el sabor salino y fresco del albariño, en una edición que más allá de la vista juega con otros sentidos.
La gran ola
Tras las declaraciones de los protagonistas se desvela, ante la cara de asombro de los presentes, un escenario de ficción. Cae el telón y nos asomamos a la piscina del sótano de esta facultad, donde los alumnos hacen sus prácticas de ingeniería. En el centro aparece la recreación de una botella gigante, fabricada de porexpan y fibra de vidrio, y lacada en azul, emulando los detalles de la actual etiqueta. Al ritmo de la música, las luces y las olas, generadas por las palas motorizadas de uno de los extremos de la piscina, la botella empieza a bailar a la espera de alcanzar La gran ola ‘atlántica’ de Kanagawa, ahora bajo el prisma de la diseñadora madrileña.
Ana Locking se ha inspirado en esta famosa estampa japonesa del pintor Katsushita Hokusai, durante el proceso creativo. Objetivo cumplido. Se ha logrado sorprender y conquistar a los presentes, que continúan la velada brindando con Mar de Frades by Ana Locking y disfrutando del catering de los chefs Iván Morales y Álvaro Castellanos, integrantes de Grupo Arzábal.
Mar de Frades fue en la década de los ochenta del pasado siglo la primera bodega en embotellar su albariño, D.O Rías Baixas, en una botella azul. La etiqueta termocrómica, que indica la temperatura óptima de consumo mediante la aparición de un galeón azul, fue otro de sus hitos de innovación.
Su nueva edición llegará al mercado el próximo 1 de noviembre con una tirada de 30.000 botellas, que se comercializarán en España y otros mercados como China, México, Suiza o Reino Unido.