La Navidad es para reunirse, para disfrutar de la compañía de los tuyos, es la época del año en la que más brindis se hacen, escuchamos un sin fin de chinchines en cenas familiares, reuniones de amigos, es el gesto de celebración. En Navidad, brinda y celebra. El sonido de un brindis va acompañado de la mirada cómplice de quienes sujetan la copa. Sonido: chinchin; mirada y sonrisa en un ritual que se repite con todos los acompañantes. Palabras de agradecimiento por el año que se escapa, peticiones de buenos deseos para lo que está por venir forman parte de esta tradición que repetimos cada año por estas fechas.

La sensación de brindar

Según se cuenta los Romanos, grandes aficionados al vino, decían que se podía disfrutar con el gusto, el olfato, la vista y el tacto, que el único sentido que no tenía este caldo de dioses era que no tenía sonido. Así nace la tradición de chocar las copas con el objetivo de completar todas las experiencias sensoriales del vino.

Si hablamos de los sentidos, la Navidad es una gran experiencia sensorial, donde en estos momentos de reunión tiene como protagonista al sentido del gusto. Porque nuestras celebraciones navideñas giran alrededor de una mesa.

Las citas de la Navidad

Cinco grandes citas que van desde Nochebuena, Navidad, Nochevieja, Año Nuevo y que cierran con el Día de Reyes en las que los menús festivos nos juntan en una misma mesa. Porque así celebramos. Menús que son el sabor puro de la Navidad, y que en muchos casos se disfrutan solamente una vez al año y su sabor nos rememora todas las Navidades de nuestra vida.

Menús que maridan con unos vinos elegidos para una ocasión tan especial. Nuestro albariño de Mar de Frades tiene la fortuna de sentarse en muchas mesas ya que es un acompañante perfecto, con su sabor salino, que marida a la perfección con mariscos y pescados, uno de los grandes clásicos de los menús navideños.

Hablábamos de sentidos en Navidad y los cuidamos más que nunca. Vestimos la mesa para que todo se disfrute desde el ambiente más festivo que es la Navidad. Este año, nuestra última Edición Limitada diseñada por Lorenzo Caprile marida a la perfección con las mesas más navideñas. Su decoración barroca, tan Caprile, de color rojo, tan navideño, es una opción perfecta para sorprender con la última novedad de Mar de Frades a tus invitados. Y es el detalle perfecto del invitado para llevar a las celebraciones.

Mar de Frades Monteveiga

Otro detalle perfecto tanto para la mesa como para ser un gran regalo bajo el árbol es la opción más premium de nuestros vinos: Mar de Frades Monteveiga. Un vino que nace a 160 m de altitud en la subzona de la Ribera del Ulla, gracias a un cultivo más selectivo por su privilegiada situación que da lugar a un vino más longevo y elegante. Una opción ideal para los menús navideños de estas fechas y para ser un objeto de regalo perfecto.

El brindis más importante del año

Si en todas las Navidades no paramos de brindar, es el día 31 o mejor dicho el 1 de enero a partir de las 00.00h, en el que hacemos ese brindis que abre al año y guardamos para la ocasión nuestro espumoso más especial.

Una opción perfecta es Brut Nature de Mar de Frades: el sabor de nuestro albariño en una versión espumosa de elegante y fina burbuja, que se consigue gracias al tradicional método de Champenoise.

En Navidad, brinda y celebra. Hazlo con pasión porque es la Navidad es para vivirla así.