
VUELVE CASA ATLÁNTICA A MADRID
El Atlántico no solo se contempla, también se vive. Y del 26 al 29 de junio,...
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Vivimos el verano, esa época del año que nos permite romper con la tiranía de los horarios. La luz y, parece que las horas, se alargan permitiéndonos vivir más que nunca. Eso es el verano, época de vacaciones, pero, sobre todo de ese sueño de modus vivendi. Un encantamiento que dura solo dos meses al año.
Las horas se alargan y nuestro ritmo de vida nos permite ser más pausados, sentir y disfrutar más. Porque el verano se vive más intensamente, nos despojamos de muchas rutinas y conquistamos más que nunca esa sensación tan Mar de Frades de LIBERTAD.
Ese plan de playa que alarga y lleva la mañana a la hora de la tarde, esa comida con brindis que su sobremesa se apodera casi de la hora invernal de la cena, esa siesta que cuesta desperezarse porque no hay un despertador que la rompa. Salimos del encapsulamiento de los mismos lugares para descubrir nuevos destinos o redescubrir los que ya conocemos.
¿Y si ponemos un color a ese modus vivendi veraniego?
Al cerrar los ojos y sentir el color de esta libertad veraniega viene a nuestra mente indudablemente el color azul. El de los cielos intensos sin nubes, que resplandecen con más horas de luz que nunca. La máxima expresión de todo el año del azul cian que nos acompaña ahí arriba. Es imposible ver un azul más vibrante y que haga soñar más que este azul del cielo en verano.
Un azul cian que se desdibuja muchas veces en el horizonte con el color del mar, marcando una casi imperceptible línea de azules que se tocan, aunque no compartan el mismo estado, uno gaseoso y otro líquido, unidos en la misma sensación de Pantone azul infinito.
La sensación del Pantone azul infinito
Los azules de los mares rodean nuestras costas. Ese azul infinito de los horizontes de nuestros mares. Esos azules atlánticos llenos de fuerza, el azul Cantábrico que el más hipnótico de nuestro litoral, y también esos azules turquesas y rítmicos que nos mecen en el Mediterráneo. Un recorrido de azules que no solo cambia con sus mares, también de la mañana al atardecer, invitándonos a descubrir en estos días de verano toda su gama de sus pantones en movimiento.
El regalo de las variedades de sus colores nos acompaña en un verano en el que se busca vivir por fin ese tiempo de libertad. Un verano para dejarse sorprender por el espíritu de Vivir en Azul. Esa sensación de ser tu mejor versión, de vivir momentos únicos y brindar por la vida. Porque el azul es para Mar de Frades pura inspiración, la libertad de sentir el azul infinito, que es puro verano.
¿Cuál es el Pantone Azul de tu verano 2024?