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¿En qué fecha naciste?

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Una vendimia bañada por la ria de Arosa

La vendimia es el primer paso para forjar la personalidad de Mar de Frades, un sabor de influencia atlántica y un carácter inconfundible. Un proceso cuidado al detalle para conseguir un vino que no es como ningún otro.

La vendimia la hacen posible 285 viticultores. Cada uno de ellos cuenta con una pequeña parcela, la cual controlamos todo el año, para conseguir la acidez y el azúcar que necesitamos. Lo más importante para nosotros es que las cepas se encuentren a los alrededores de la ría de Arousa, para que la salinidad del Atlántico esté presente en cada sorbo. Se realiza en su totalidad manualmente, cortando racimo a racimo, y una vez recogida toda la uva se envía a bodega.

Este año la maduración fue particular en el sentido a que dentro de nuestro valle, el Salnés, fue muy desigual entre parcelas de Mar de Frades

Mientras unas estaban ya listas otras estaban completamente verdes, debido al clima seco y falta de lluvia de este año. Las plantas más adaptadas al medio maduraron en su momento, pero las más jóvenes les costó llegar por el cambio en el tiempo

Aromáticamnte podemos hablar de que si el año pasado (con primavera lluviosa y mucho calor en verano) habíamos tenido aromas más tropicales, este año con la maduración mas espaciada en el tiempo nos iremos más a aromas cítricos, manzana etc. En definitiva, más fresco.

La vendimia es el primer paso para forjar la personalidad de Mar de Frades

Allí se analiza cada partida para comprobar que cumple con la acidez y el azúcar necesario. Se le asignan 60 puntos al azúcar y 40 a la acidez, y esto mide la calidad de la uva. Solo nos quedamos con las mejores partidas, que son las que finalmente entran a bodega, donde se despalillan los racimos y se prensan, dando resultado el mosto.

El mosto debe reposar en acero inoxidable, fermentando con las levaduras autóctonas de la zona, que se arraigan a la uva desde la cepa. Durante todo este proceso controlamos la temperatura (más o menos 15º) para asegurarnos de no perder aromas, y durante 20 y 25 días la levadura actúa transformando el azúcar en alcohol.

Solo nos quedamos con las mejores partidas de uva

Pero esto no acaba aquí, la “vendimia” de 2018 comienza en breve. Tenemos que esperar a que caiga la hoja de la cepa para poder podarla, y así empieza de nuevo el ciclo.

El resultado de todo este proceso es un vino muy frutal, con una importante presencia de sabores tropicales y manzana verde. Pero sobre todo una presencia salina atlántica que es indiscutible en Mar de Frades.

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